Un minuto y medio de tranquilidad...

Esta foto que a cualquier persona le parecería de lo más normal, ha sido todo un logro para nosotros ya que Martita ha tardado un mes en descubrir el placer de succionar un chupete. Un mes intentando que se calmase con el chupetito y un mes que ha estado escupiéndolo. Tampoco habrá estado mucho tiempo con él,un minuto, pero ha sido un minuto muy tranquilo, para ella y para nosotros. Aún así todavía no le acaba de convencer. Lo cierto es que es una niña muy tranquila, y si está llorona normalmente es porque tiene hambre, y del chupete no sale leche con lo que no le vale.
Nos hemos emocionado tanto viendo como empleaba por primera vez su chupete que no nos hemos resistido y le hemos hecho una foto, es ésta.

Hace más el que quiere...que el que puede

El Sábado pasado 16 de Mayo estuvimos en Acebo (pequeño pueblito de la Sierra de Gata)en unas piscinas naturales, celebrando el cumpleaños de una amiga. Hicimos una merienda-cena en el campo. Martita es tan buena que nos dejó estar hasta las 23:30 de la noche ya que come y sigue durmiendo feliz, no hay cosa que más le guste que estar fuera de casa, como a sus papás. Por eso, después de aquella tarde experimentamos a cenar fuera con ella en una pizzería tranquila (donde no se puede fumar) y otra noche en una terraza. Por ahora ya nos damos con un canto en los dientes, y es que aunque nos da un trabajo loco todavía nos deja tener una mínima vida social.

Momentos de descanso...

Después de 3 semanas con Martita , esta foto describe muy bien como ha cambiado nuestra vida, ya que por muy bien que se porte (que se porta), cuidarla diariamente requiere unos hábitos a los que nos vamos acostumbrando poco a poco.

¿Parecidos razonables?

Luisa,Marta y Javi.

Día de la Madre

Mi madre encuentra la felicidad cuando yo la encuentro. Cuando yo vivo algo hermoso, lo vive a través de mi experiencia. Mi madre reza por mí, incluso cuando yo solo rezo por mi mismo. Mi madre me daría el mundo entero si fuese capaz. Gracias Mamá.

Al fin en casa

Resulta difícil expresar con palabras todo el mundo de sensaciones vividas estos últimos siete días. Nervios, ilusión, ansiedad, desesperación, cansancio, risa, llanto, hambre, tristeza, alegría… son adjetivos que se aproximan pero que no logran captar en su totalidad la intensidad de aquellas horas.

Como una imagen, dicen, vale más que mil palabras os mostramos esta presentación de fotografías que consiguen congelar en un instante miles de matices.